La delgadez del nuevo MacBook afecta en su rendimiento

Todos nos quedamos ensimismados con el grosor del nuevo MacBook que presentó Tim Cook en la última keynote de Apple, que incluso se burla del "grosor" del MacBook Air actual. Pero para que el portátil sea tan delgado hay que hacer ciertos sacrificios... y no hablo precisamente de eliminar los puertos hasta dejar sólo un USB Type-C.

Esos sacrificios vienen de la mano de su rendimiento, ya que han aparecido los primeros tests Geekbench del nuevo MacBook y su resultado es comparable al de los MacBook Air del 2011: 1924 y 2044 puntos en las pruebas single-core y 4038 y 4475 puntos en las pruebas multi-core.

El nuevo MacBook y su rendimiento intentan seguir el camino que inició el primer modelo del MacBook Air

Los modelos actuales de los MacBook Air, renovados también en la pasada keynote, dan una puntuación de 2881 puntos en las pruebas single-core y 5757 puntos en las pruebas multi-core. Vale, no se trata de una mejora aplastante, pero confirma nuestras sospechas que los procesadores del nuevo MacBook no son tan potentes como les habría gustado en Apple.

Es justo como ocurría con el primer MacBook Air: era un ordenador delgadísimo y ligerísimo para su época, pero poco potente y bastante caro. Pero ahora mismo es uno de los ordenadores portátiles más vendidos del mercado. Poco a poco, a medida que los avances tecnológicos lo permitan, el nuevo MacBook seguirá el mismo camino. Excepto que ahora también estará en space gray y dorado, claro.